Desmentimos Varios Mitos del Deporte

En:

En los últimos tiempos la vida saludable y el ejercicio físico parecen estar ganando cada vez más adeptos, pasando incluso a reconocerse esto como una “moda”, quién sabe si pasajera o duradera. Esto es así puesto que son cada día más las personas que se suman a cuidarse un poco más, ya sea con una dieta más saludable, quitándose de ciertos “caprichos” o realizando un poco (o mucho) deporte. Solo hay que ver como cada vez son más los libros vendidos sobre deporte y alimentación, o los denominados “influencers” del deporte que basan sus redes sociales en un estilo de vida sano y activo.

No obstante, no todo es color de rosa como puede parecer a simple vista puesto que, junto con la extensión de esta “corriente deportista”, también se han difundido falsos mitos sobre el deporte y sus variantes que no solo nos engañan, sino que en ocasiones pueden incluso poner en peligro nuestra salud. Desde Faster Wear buscamos lo promoción de la actividad física, pero siempre que esta se realice de manera adecuada, por lo que desmentimos falsas teorías:

Sudar adelgaza.

Quizá sea una de las ideas más extendidas en el mundo del deporte, llegando a pensar que una mayor sudoración implica una mayor pérdida de grasa corporal, siendo esto totalmente incierto. La sudoración viene acompañada por un ejercicio físico más o menos intenso que, dependiendo de la transpiración corporal de cada persona, generará una cantidad de sudor u otra.

Es más, a mayor sudoración de nuestro cuerpo, más agua vamos a perder, por lo tanto estaremos más deshidratados y disminuirá nuestro rendimiento físico. Por lo tanto hay que olvidarse de fajas abdominales o la peligrosa idea de salir a correr en verano con una sudadera.

Reducir agujetas con agua y azúcar o más ejercicio.

Otra de las ideas más extendidas en los últimos años en el mundo del deporte es acerca de las agujetas. Este dolor – fuerte o moderado – que aparece en nuestro cuerpo entre las 24-48h tras la realización de ejercicio físico ha querido ser explicado y tratado con el paso de los años, divulgándose así consejos erróneos.

En primer lugar se pensaba que dichas agujetas aparecían por la acumulación de ácido láctico en nuestro cuerpo, por lo que se recomendaba beber agua con azúcar para reponer nuestros músculos. No obstante, con el tiempo se descubrió que dicho dolor se debía a la microrrotura de fibras musculares por lo que con una realización del mismo ejercicio al día siguiente no las eliminaría puesto que el dolor permanece. Los expertos coinciden en que su curación es un proceso natural que puede ayudarse de un ejercicio moderado o de reposo absoluto.

Hacer abdominales reduce la tripa

No hay nada más que echar un vistazo al gimnasio para ver como la mayoría de la gente se lanza a hacer abdominales pensando que estos le van a ayudar a tener un vientre plano. Esto no es cierto puesto que si no se acompañan con actividades de cardio no lograremos otra cosa que tener aún más tripa. Esto ocurre ya que estamos hipertrofiando nuestros músculos del abdomen, los cuales van a crecer y generarán una sensación de mayor hinchazón abdominal.

Cuanto más ejercicio, mejor

Estamos de acuerdo en que ejercicio es sinónimo de bienestar, pero siempre que se cumplan unos parámetros básicos. Es decir, el hecho de realizar una actividad de forma prolongada y en grandes cantidades no se va a traducir en un mayor rendimiento puesto que el descanso es fundamental. Por lo tanto, es mucho más recomendable y beneficioso para nuestra salud la actividad moderada acompañada con un descanso y recuperación necesario, que una frecuencia e intensidad elevada que, sumado a un escaso descanso, nos pueda provocar lesiones.

Domingo Lunes Martes Miércoles Jueves Viernes Sábado Enero Febrero Marzo Abril Mayo Junio Julio Agosto Septiembre Octubre Noviembre diciembre